SEGUNDA PARTE
Reina David sobre todo Israel
1Vinieron a David, a Hebrón, todas las tribus de Israel, y hablaron, diciendo: <<Hueso tuyo y carne tuya somos; 2ya antes, cuando reinaba Saúl sobre nosotros, tú sacabas a Israel y entrabas con él. Además, Yavé te ha dicho: Apacienta mi pueblo y sé el jefe de Israel>>. 3Vinieron, pues, todos los ancianos de Israel a David, a Hebrón; y David hizo con ellos alianza en Hebrón ante Yavé, y ungieron a David rey sobre todo Israel.
4Treinta años tenía David cuando comenzó a reinar, y reinó cuarenta años. 5Reinó en Hebrón, sobre Judá, siete años y seis meses, y treinta y tres años en Jerusalén, sobre todo Israel y Judá.
6El rey se dirigió con su gente a Jerusalén, contra los jebuseos, que habitaban la tierra, que dijeron a David: <<No entrarás tú aquí; ciegos y cojos bastarán para impedírtelo>>. Con lo que querían decir: <<Jamás entrará David aquí>>. 7Pero David se apoderó de la fortaleza de Sión, que es la ciudad de David. 8Pues había dicho: << ¿Quién, batiendo al jebuseo, llegará a alcanzar por el túnel a los ciegos y cojos, aborrecidos del alma de David?>> Por eso quedó en proverbio: <<No entrarán en la casa los ciegos y los cojos>>.
9David estableció su residencia en la fortaleza, y la llamó la ciudad de David y edificó en derredor, desde el terraplén para adentro. 10David iba creciendo en poder cada vez más, y Yavé, Dios Sebaot, estaba con él. 11Hiram, rey de Tiro, envió a David una embajada y maderas de cedro, carpinteros y canteros, que edificaron la casa de David.
12Conoció David que Yavé le había confirmado rey de Israel y que realzaba su reino por amor de Israel, su pueblo. 13Tomó David más concubinas y mujeres en Jerusalén después de venir de Hebrón, y le nacieron hijos e hijas. 14He aquí los nombres de los que le nacieron en Jerusalén: Samúa, Sobab, Natán, Salomón, 15Jibjar, Elisúa, Nefeg, Jafia, 16Elisama, Elijada y Elifelet.
17Cuando los filisteos supieron que David había sido ungido rey de todo Israel, subieron todos en busca suya, y David, que lo supo, bajó a su encuentro. 18Los filisteos hicieron una incursión en el valle de Refaím, 19y David consultó a Yavé, diciendo: << ¿Subiré contra los filisteos? ¿Los entregarás en mis manos?>> Y Yavé dijo a David: <<Sube, pues de cierto los entregaré en tus manos>>. 20Vino, pues, David a Baal Parasim, donde los derrotó, y dijo: <<Yavé ha roto a mis enemigos como rompen las aguas>>. Por eso se dio a aquel lugar el nombre de Baal Parasim. 21Dejaron allí sus ídolos, que David y su gente se llevaron. 22Volvieron los filisteos a subir y a invadir el valle de Refaím. 23Consultó David a Yavé, y Él le respondió: <<No subas; rodéalos por detrás y atácalos frente a las balsameras. 24Cuando entre las balsameras oigas ruido de pasos, ataca fuertemente, porque es Yavé, que marcha delante de ti para derrotar al ejército de los filisteos>>. 25David hizo lo que Yavé le mandó, y batió a los filisteos desde Gabaón hasta Guezer.
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